viernes, 1 de febrero de 2019

Señales de vida y Lecto-escritura precoz

Hola a los que quedéis por ahí!! Perdón por estar tan desaparecida, pero no he tenido ni tiempo ni novedades que contar. Por suerte (después de la racha tan horrible que hemos pasado), nuestra vida lleva unas semanas en una maravillosa rutina aburrida e intrascendente. Mis niños están sanos, nos hemos mudado a un piso más grande y todos crecemos/envejecemos inexorablemente.

Nuestra única novedad últimamente es que Renacuajo, que aún no ha cumplido los 5 años, ya lee sin casi dificultad, tanto mayúsculas como minúsculas. Y sí, es muy pronto, y no, no me parece algo bueno ni positivo en general. Desde el curso pasado, ya empezó a mostrar síntomas de querer leer: sabía todas las letras y cómo se pronunciaba cada letra con las 5 vocales, empezó a leer palabras muy sencillas en mayúsculas... Pero llegó el verano, lo olvidó y se dedicó a otras cosas más divertidas. Pero al volver al cole en septiembre, volvió la explosión y en pocos meses, se ha soltado tremendamente. 

Con estas cosas de Renacuajo, siempre tengo un poco de miedo. Me da miedo hacer de él un bicho raro, el típico niño empollón repelente aislado socialmente. Pero por otro lado, reprimir sus ilusiones y motivación me parece un horror. Su "seño" habló con nosotros hace como un mes y nos contó sus impresiones. Pensaba que iba muy por delante respecto a maduración lingüística que sus compañeros y que estaba perdiendo motivación, así que nos propuso llevárselo a su mesa a ratos a él solo y ponerlo a practicar la lectura. Accedimos y hemos notado mucho cambio. Termina antes las tareas por la ilusión de poder ir a leer, las hace mejor y se siente muy orgulloso de sí mismo. 

Todos los expertos no han dicho que este avance de maduración puede no significar absolutamente nada: hay niños que maduran antes pero luego se quedan más parados y al llegar a primaria, se igualan con el resto de sus compañeros. Sinceramente, es la opción que más me gustaría. Pero también acechan las altas capacidades. Normalmente, los niños con altas capacidades o talentos múltiples destacan en preescolar o infantil por su precocidad lingüística, artística o matemática y en vez de parar y equipararse, van aumentando, a veces exponencialmente. A esto, le juntamos la alta actividad de Renacuajo, que es una lagartija y no para quieto y su dificultad para concentrarse y nos plantea una crianza difícil. Pero por ahora, lo vemos feliz e integrado, ilusionado con aprender (tanto con la lectura como cuando en clase, con sus compañeros, practica las vocales) y sano, con lo cual, iremos paso a paso acompañándolo en su desarrollo y respetando sus ritmos.

Y vosotros, ¿conocéis casos de niños precoces que luego se han igualado al resto? ¿conocéis a niños con altas capacidades que estén bien integrados y felices? ¿Consideráis que vuestros hijos han sido precoces en algún ámbito? Un abrazo a todos y gracias por seguir a mi lado, aunque venga tan poquito a veces por aquí!